El premio fue
entregado por la presidenta de la Sociedad Peruana de Adolescencia y Juventud,
Dra. María del Carmen Calle Dávila. El trabajo de los docentes de la UNT fue
elaborado en el 2010, fruto de una experiencia con jóvenes entre 15 y 29 años
que presentaban discapacidad motora y visual.
Con
la investigación “Contribución de las
políticas sociales a la calidad de vida de los jóvenes con discapacidad” la
docente de Enfermería de la Universidad
Nacional de Trujillo, Dra. Flor
María del Rosario Huertas Ángulo con la asesoría de la Dra. Esther Ramírez García, obtuvo el Primer
Puesto del VIII Premio Internacional de
Investigación en Adolescencia y Juventud "María Miranda Lozano",
organizado por la Sociedad Peruana de
Adolescencia y Juventud. El concurso se convocó desde el IX Congreso
Internacional de Salud y Desarrollo de Adolescentes y Jóvenes celebrado en Lima
del 23 al 25 de agosto del 2012.
El
premio fue entregado por la presidenta de la Sociedad Peruana de Adolescencia y
Juventud, Dra. María del Carmen Calle
Dávila. El trabajo de los docentes de la UNT fue elaborado en el 2010,
fruto de una experiencia con jóvenes entre 15 y 29 años que presentaban discapacidad
motora y visual, así como directivos de las asociaciones de personas con
discapacidad de la ciudad de Trujillo. “Se hizo una investigación descriptiva
cualitativa con entrevistas semiestructuradas y fuentes documentales y al final
se pudo notar que las políticas sociales en nuestro país son excelentes, pero
sólo en el papel, porque en los hechos falta mucho por hacer”, expresó Huertas
Ángulo.
De
esta manera, la especialista recomendó mejorar la accesibilidad a espacios
físicos con rampas; en Educación si bien se habla de la educación inclusiva,
pero esta no se cumple en toda su dimensión. También faltan servicios de
rehabilitación para fortalecer sus habilidades. Entre los resultados de la
investigación también se puede señalar que los jóvenes con discapacidad carecen
de un trabajo digno acorde a sus capacidades, con grandes restricciones en
apoyos; inmersos en un entorno inaccesible no solo físico sino carente de
sensibilidad y; con políticas desintegradas e inertes que no aportan efectiva ni
eficazmente a la mejora de su calidad de vida.
“Felizmente
tienen familiares que los complementan y fortalecen, generando el amor y
estímulo para seguir enfrentándose a la vida”, subrayó. En cuanto a la
impresora Braille que fue donada recientemente por la empresa Minera Barrick Misquichilca, dijo que
se trata de un gran aporte a los estudiantes con discapacidad visual que
estudian en la UNT, que podrán hacer sus lecturas sin depender de otra persona
que les lea los libros. María Miranda Lozano fue una experta en salud de los
adolescentes en el Perú, y trabajó por ellos. Lamentablemente, falleció junto a
sus 3 hijos, en un accidente en Bolivia, el 19 de febrero del 2002, a los 38
años de edad.