Mons. Miguel Cabrejos Vidarte OFM, junto con los Arzobispos y obispos de nuestro país, elevaron sus plegarias, en nombre de los 28 millones de peruanos ante los restos del Apóstol San Pedro. Allí renovaron su adhesión al Santo Padre y su deseo de seguir trabajando por la Evangelización en el Perú y por la Gran Misión Continental.
Por primera vez el Arzobispo Metropolitano de Trujillo en su condición de Presidente de la Conferencia Episcopal Peruana (CEP), presidió la celebración Eucarística de los obispos del Perú en el altar de la Tumba de San Pedro, ubicada en los interiores de la Basílica Vaticana. El histórico acto religioso se realizó hoy lunes a las 7:00 de la mañana (hora italiana) en el marco de la “Visita ad Limina Apostolorum”, con la asistencia de todos los Obispos de las Jurisdicciones eclesiásticas del Perú.
Mons. Miguel Cabrejos Vidarte OFM, junto con los Arzobispos y obispos de nuestro país, elevaron sus plegarias, en nombre de los 28 millones de peruanos ante los restos del Apóstol San Pedro. Allí renovaron su adhesión al Santo Padre y su deseo de seguir trabajando por la Evangelización en el Perú y por la Gran Misión Continental.
Posteriormente, a las 11:00 de la mañana, en la Basílica de San Pedro, los prelados peruanos fueron recibidos por el Santo Padre Benedicto XVI, y en este encuentro el Arzobispo de Trujillo le presentó el saludo de todos los obispos, en el cual le manifestó al Sumo Pontífice que los prelados quieren “que la Iglesia en el Perú sea signo de comunión, esperanza y vida. Defensora de la familia, “patrimonio de la humanidad que constituye uno de los tesoros más importantes de los pueblos latinoamericanos y caribeños”.
Por primera vez el Arzobispo Metropolitano de Trujillo en su condición de Presidente de la Conferencia Episcopal Peruana (CEP), presidió la celebración Eucarística de los obispos del Perú en el altar de la Tumba de San Pedro, ubicada en los interiores de la Basílica Vaticana. El histórico acto religioso se realizó hoy lunes a las 7:00 de la mañana (hora italiana) en el marco de la “Visita ad Limina Apostolorum”, con la asistencia de todos los Obispos de las Jurisdicciones eclesiásticas del Perú.
Mons. Miguel Cabrejos Vidarte OFM, junto con los Arzobispos y obispos de nuestro país, elevaron sus plegarias, en nombre de los 28 millones de peruanos ante los restos del Apóstol San Pedro. Allí renovaron su adhesión al Santo Padre y su deseo de seguir trabajando por la Evangelización en el Perú y por la Gran Misión Continental.
Posteriormente, a las 11:00 de la mañana, en la Basílica de San Pedro, los prelados peruanos fueron recibidos por el Santo Padre Benedicto XVI, y en este encuentro el Arzobispo de Trujillo le presentó el saludo de todos los obispos, en el cual le manifestó al Sumo Pontífice que los prelados quieren “que la Iglesia en el Perú sea signo de comunión, esperanza y vida. Defensora de la familia, “patrimonio de la humanidad que constituye uno de los tesoros más importantes de los pueblos latinoamericanos y caribeños”.
Por otro lado, agradeció al Santo Padre por haberlos recibido, diciéndole: “Santidad: haciendo eco del alma y del corazón de todos los Obispos del Perú, aquí presentes, quiero agradecerle la paternal bondad con la que nos ha recibido y la benevolente solicitud para escuchar la exposición de la realidad y de los proyectos pastorales de nuestras Iglesias particulares. Que Dios lo bendiga por la preocupación que tiene por la Iglesia de Dios en el Perú”, señaló el prelado ante el Sumo Pontífice.
Finalmente añadió: “Beatísimo Padre: imploramos su Bendición Apostólica, extendida a todos los fieles de nuestro querido Perú”. La “Visita Ad Limina Apostolorum”, es una visita que realizan los Obispos de cada país al Santo Padre, para presentar al Romano Pontífice un informe sobre la marcha de la Iglesia en el país y su relación con el Estado y la sociedad. Esta es la primera visita Ad Limina de los Obispos del Perú al Papa Benedicto XVI, la anterior fue en junio de 2002, donde se entrevistaron con el recordado Papa Juan Pablo II.
Finalmente añadió: “Beatísimo Padre: imploramos su Bendición Apostólica, extendida a todos los fieles de nuestro querido Perú”. La “Visita Ad Limina Apostolorum”, es una visita que realizan los Obispos de cada país al Santo Padre, para presentar al Romano Pontífice un informe sobre la marcha de la Iglesia en el país y su relación con el Estado y la sociedad. Esta es la primera visita Ad Limina de los Obispos del Perú al Papa Benedicto XVI, la anterior fue en junio de 2002, donde se entrevistaron con el recordado Papa Juan Pablo II.
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