El regreso de esta élite policial es una medida necesaria por la calidad y la oportunidad de sus acciones, porque es una forma de combatir la delincuencia y la criminalidad, porque pueden actuar sin temor a ser reconocidos y luego ser amenazados, por ello garantizan una manera más eficaz de combatirla.
Por: Enrique Benites Delgado
La buena noticia sobre el regreso a nuestra ciudad de los escuadrones de la Policía Nacional denominados “Robocops”, por la vestimenta que usan, es una excelente decisión. Vendrán acompañando al Ministro del Interior, Tnte. Gral. PNP ® Octavio Salazar Miranda, quien “amenaza” con venir a despachar en esta ciudad y coadyuvar a lograr la tranquilidad de sus ciudadanos.
En Trujillo, estos grupos de élite de la PNP ya son conocidos, vinieron con el ahora presidente del Congreso, Luis Alva Castro, durante su gestión en el Ministerio del Interior, realizando sendos operativos de rastrillaje en las zonas más peligrosas de nuestra ciudad, y arrojaron como resultado la captura de numerosos delincuentes prontuariados y de alta peligrosidad logrando mayor seguridad para los ciudadanos. Conozco de cerca el accionar del ahora ministro y sé que cumplirá su palabra.
Las acciones de violencia, los asesinatos, los asaltos a mano armada, los secuestros al paso, la acción de los “marcas” se han incrementado en forma peligrosa y ya era hora de tomar acciones para detener esta ola de violencia. El regreso de esta élite policial es una medida necesaria por la calidad y la oportunidad de sus acciones, porque es una forma de combatir la delincuencia y la criminalidad, porque pueden actuar sin temor a ser reconocidos y luego ser amenazados, por ello garantizan una manera más eficaz de combatirla.
Claro que habrá quienes se opongan, son los infaltables personajes que más parecen ser subvencionados por la delincuencia organizada, son los que gritan y reclaman que se respeten los “derechos humanos” de quienes no tienen respeto ni reparo alguno en asesinar, matar a balazos o a cuchilladas, dejando sin padres, hermanos o hijos a numerosas familias honorables. Falsa moral.
¿Quienes devuelven los seres queridos a las familias que las pierden en forma salvaje? ¿De dónde sale el dinero que los delincuentes tienen pagar sus abogados “defensores”? ¿Tanta es la ambición para ganar unos cuantos soles que se defienden asesinos? Que la decisión del actual Ministro del Interior se concretice es el amplio deseo de toda la ciudadanía, la ley se ha hecho para ser respetada por cada uno de nosotros, para que las autoridades las apliquen con la severidad que la constitución y las leyes les otorga.
Que a las autoridades no les tiemble la mano para aplicar las sanciones que merecen cada uno de estos delincuentes prontuariados y de nula oportunidad de ser reinsertados en la sociedad por propia actitud. Que el delincuente sepa que la libertad cuesta. Juntos a combatir la delincuencia.
Por: Enrique Benites Delgado
La buena noticia sobre el regreso a nuestra ciudad de los escuadrones de la Policía Nacional denominados “Robocops”, por la vestimenta que usan, es una excelente decisión. Vendrán acompañando al Ministro del Interior, Tnte. Gral. PNP ® Octavio Salazar Miranda, quien “amenaza” con venir a despachar en esta ciudad y coadyuvar a lograr la tranquilidad de sus ciudadanos.
En Trujillo, estos grupos de élite de la PNP ya son conocidos, vinieron con el ahora presidente del Congreso, Luis Alva Castro, durante su gestión en el Ministerio del Interior, realizando sendos operativos de rastrillaje en las zonas más peligrosas de nuestra ciudad, y arrojaron como resultado la captura de numerosos delincuentes prontuariados y de alta peligrosidad logrando mayor seguridad para los ciudadanos. Conozco de cerca el accionar del ahora ministro y sé que cumplirá su palabra.
Las acciones de violencia, los asesinatos, los asaltos a mano armada, los secuestros al paso, la acción de los “marcas” se han incrementado en forma peligrosa y ya era hora de tomar acciones para detener esta ola de violencia. El regreso de esta élite policial es una medida necesaria por la calidad y la oportunidad de sus acciones, porque es una forma de combatir la delincuencia y la criminalidad, porque pueden actuar sin temor a ser reconocidos y luego ser amenazados, por ello garantizan una manera más eficaz de combatirla.
Claro que habrá quienes se opongan, son los infaltables personajes que más parecen ser subvencionados por la delincuencia organizada, son los que gritan y reclaman que se respeten los “derechos humanos” de quienes no tienen respeto ni reparo alguno en asesinar, matar a balazos o a cuchilladas, dejando sin padres, hermanos o hijos a numerosas familias honorables. Falsa moral.
¿Quienes devuelven los seres queridos a las familias que las pierden en forma salvaje? ¿De dónde sale el dinero que los delincuentes tienen pagar sus abogados “defensores”? ¿Tanta es la ambición para ganar unos cuantos soles que se defienden asesinos? Que la decisión del actual Ministro del Interior se concretice es el amplio deseo de toda la ciudadanía, la ley se ha hecho para ser respetada por cada uno de nosotros, para que las autoridades las apliquen con la severidad que la constitución y las leyes les otorga.
Que a las autoridades no les tiemble la mano para aplicar las sanciones que merecen cada uno de estos delincuentes prontuariados y de nula oportunidad de ser reinsertados en la sociedad por propia actitud. Que el delincuente sepa que la libertad cuesta. Juntos a combatir la delincuencia.
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