Como se recuerda, los primeros días de octubre de 2008, el arqueólogo Daniel Castillo Benites denunció que la construcción de un supuesto reservorio de agua a cargo de la empresa privada Physalis Perú S.A.C., habría dañado un 70% de la infraestructura de la plaza hundida de la zona arqueológica.
La inacción del Instituto Nacional de Cultura de La Libertad podría permitir la consumación de nuevo atentado contra nuestro patrimonio arqueológico, esta vez se trata de la zona conocida como Cerro Colorado, a unos tres kilómetros al noroeste de la ciudad de Cascas en la provincia de Gran Chimú, ante la pretensión del fiscal Edwin Valderrama Varas, quien pide la nulidad del proceso de investigación aduciendo que no existe restos arqueológicos en la zona.
Como se recuerda, los primeros días de octubre de 2008, el arqueólogo Daniel Castillo Benites denunció que la construcción de un supuesto reservorio de agua a cargo de la empresa privada Physalis Perú S.A.C., habría dañado un 70% de la infraestructura de la plaza hundida de la zona arqueológica. Este lugar es uno de los más importantes en la zona porque habría sido levantado entre los años 1800 y 500 a.C. por la cultura Cupisnique.
“Fue un centro ceremonial, tal vez dedicado al culto del agua, que por su ubicación permitía una alta visibilidad y le proporcionaba al entorno el valor de un espacio sagrado. No puedo creer que nadie haga nada por este lugar. Las autoridades a veces creen que el turismo viene por sí solo. Esto es increíble", señaló el especialista. Ante la denuncia de Castillo Benites, el fiscal Edwin Valderrama se constituyó en el lugar para verificar si las obras de Physalias Perú S.A.C. constituían algún tipo de delito.
Tras encontrar restos de varios ceramios, el representante del Ministerio Público envió un oficio al Instituto Nacional de Cultura de La Libertad para que dicha entidad establezca si la zona es, en efecto, una zona arqueológica y si está considerada como patrimonio cultural. La visita estuvo a cargo del jefe del departamento de Arqueología del INC, José Carcelén, quien confirmó la existencia de restos arqueológicos así como también evalúo la magnitud de los daños ocasionados a dicha plaza ceremonial hundida.
“A pesar del tiempo transcurrido, hasta ahora el INC no ha realizado las acciones de seguimiento, de allí que muy pronto (el 15 de junio) este caso quedará anulado. El Fiscal está pidiendo la nulidad asumiendo que no existen restos arqueológicos, ante el silencio y pocas acciones hechas por parte del INCLL”, lamentó el especialista.
En Cerro Colorado nunca antes se han realizado estudios arqueológicos, refirió Daniel Castillo. Tampoco presenta evidencias de excavaciones hechas por huaqueros. “Se cree que el lugar era un centro ceremonial dedicado al culto hacia el agua, debido a su orientación a la quebrada El Palto y el río Santero. Cerro Colorado sería un ejemplo representativo de la ocupación temprana en la zona”, indicó Castillo.
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