Hugo Egas Ricalde, quien según un informe publicado en días pasados, en base a fuentes confiables, era sindicado como el supuesto responsable de permitir compras irregulares y pagos indebidos en FONCODES La Libertad, nos concedió una entrevista exclusiva donde desestima dichas denuncias y aclara su actual situación.
En días pasados, luego de previa coordinación telefónica con la Presidencia Ejecutiva del Fondo de Cooperación al Desarrollo Social (FONCODES), dependiente a su vez del Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social (MIDIS), logramos reunirnos con el Jefe Zonal de FONCODES La Libertad, Ing. Hugo Egas Ricalde, para que nos aclare su actual situación, luego de las denuncias en su contra que lo sindicaban como co-responsable de presuntas irregularidades detectadas durante los meses de octubre a diciembre en el distrito de Chugay, ubicado en la provincia andina de Sánchez Carrión, las mismas que tenían que ver con compras de semillas de papa y pagos irregulares.
Esta denuncia tenía como base el informe Nº 005-2015-MIDIS/FONCODES/UT-TRU/ETPP-JFCLL, que con fecha 9 de enero del 2015 le hace llegar el especialista de Proyectos Productivos de FONCODES, Ing. Jorge F. Cubas Llontop, donde se detalla los estados de cuenta del NEC Chugay y las observaciones realizadas al Ing. Wilson Díaz Vásquez, en su calidad de Coordinador del Proyecto de Capacidades Productivas de Emprendimiento “Mi Chacra Emprendedora-Haku Wiñay, NEC Chugay, habría incumplido con la cancelación de las compras realizadas y dejó abandonados a su suerte a los Yachachiqs que vienen realizando la capacitación de los comuneros.
Sobre el particular, Egas Ricalde aseguró que estas denuncias carecen de sustento, por cuanto su despacho al tomar conocimiento del citado informe de Cubas Llontop, inmediatamente dispuso, mediante Notificación Jefatural Nº 001-2015-FOMCODES/TRU, con fecha 13 de enero del 2015, que el Presidente del Núcleo Ejecutor del Proyecto “Mi Chacra Emprendedora” – Haku Wiñay – NEC Chugay, Sr. Gerardo Rondo Acosta, en el plazo de 4 días realice los descargos y levante las observaciones señaladas en el citado informe, bajo apercibimiento de iniciar las acciones legales y/o administrativas que correspondan.
“No es que no se haya tomado acción sobre este informe, o que se haya querido ocultar las observaciones que contiene, sino que cumpliendo con el procedimiento, se emitió la notificación al Presidente del Núcleo y al Coordinador del mismo para que levanten estas observaciones, lo cual fue cumplido en el plazo establecido; es más, se ha cumplido con todos los pagos que se adeudaban, tanto a los yachachiqs como a los proveedores certificados de semillas de papa, incluso el mismo Ing. Cubas ha verificado el levantamiento de las observaciones de su informe, con lo cual se establece que no existieron las supuestas irregularidades de las que se habla”, anotó.
Al ser consultado sobre la supuesta sobrevaloración en la compra de la semilla de papa, por la cual se pagó la suma de S/. 3.50, cuando en el mercado local (del mismo Chugay) se consigue en 80 céntimos, el funcionario aclaró que se trata de un error de interpretación por desconocimiento, pues cuando se habla de semillas se debe tomar en cuenta que existe la semilla pre básica, la básica, la certificada y la registrada. Todas ellas tienen sus diversas calidades, así tenemos que por ejemplo una semilla pre básica, cada tuberculillo está costando S/. 1.50, y de esta semilla sale la semilla básica que tiene un precio aproximado de S/. 4.00 hasta S/. 4.50, dependiendo de dónde uno lo compra.
"Así tenemos que cuando se siembra la semilla básica y se reproduce, sale la semilla certificada, y esa semilla certificada tiene un costo aproximado de 3.50 a 3.80 nuevos soles, dependiendo del mercado, tu siembras la semilla básica y sacas semilla, esa semilla tiene un precio promedio de S/. 3.00, entonces, estamos hablando de semilla de papa, no estamos hablando de semilla para consumo humano que tú compras en el mercado que vale 80 céntimos, estamos hablando semillas para siembra, para producción. Ahora, esa semilla de papa no se compra en cualquier lugar o de cualquier agricultor, se compra a proveedores semillaristas certificados por el INIA y previas cotizaciones a esos semillaristas, e incluso al mismo INIA", precisó.
Sobre el origen de estas denuncias en su contra, señaló que se trata de gente que quiere perjudicarlo porque está tratando de corregir algunos actos dolosos de la anterior gestión, los mismos que siguen su curso de investigación pertinente. “Desde que yo asumí la jefatura en La Libertad no se ha registrado ningún problema, como los que constantemente se daban con las gestiones pasadas, lo que pasa es que existen personas interesadas en opacar nuestro trabajo porque no les gusta ser fiscalizados, es por eso que inventan denuncias sobre supuestos, sin ningún sustento”, alegó el funcionario.
Egas Ricalde reconoció que si existió un incumplimiento en los plazos de entrega de los informes, con sustento documentario, por parte del Coordinador del Proyecto Wilson Díaz Vásquez, es por eso que se tomó la decisión de prescindir de sus servicios el pasado mes de enero, y en su lugar de designo a otro profesional que viene trabajando sin ningún problema hasta la fecha; asimismo, se optó por no renovar el contrato de Jorge Cubas Llontop, que venció el pasado mes de marzo, pues también registraba algunas supervisiones inconclusas, a pesar que los plazos ya estaban vencidos, dejando en claro que esto no tuvo nada que ver con el caso de Chugay.
También aclaró sobre las denuncias registradas anteriormente cuando estuvo en Huánuco, donde se le incluyó en una denuncia judicial, y las registradas en Lambayeque (Chiclayo), Egas Ricalde aseguró que se tratan de procesos que ya han sido archivados por falta de pruebas, pues nunca existió dolo de su parte. “Lo de Huánuco fue un proceso por incumplimiento de un ingeniero residente de “A Trabajar Rural”, que tuvo que ser reemplazado por otro profesional, y en el formato de pago del Núcleo Ejecutor figuraban ambos profesionales, uno que trabajo los primeros diez días y de su reemplazante, pero parece que por desconocimiento esto fue interpretado como perjuicio a la institución”.
“Lo que pasa es que como Supervisor Zonal –que era mi cargo en ese entonces- teníamos que dar el visto bueno para que se efectúen estos pagos. En Mayo del 2002 fui trasladado a Pucallpa, y el año 2005 me entero que había un proceso legal en curso, el cual nunca me fue notificado, y que ya estaba en periodo de Audiencia Oral. Parece que el fiscal ha visto el formato de quién autorizaba el pago, y me comprendieron en la denuncia por supuesto perjuicio en contra de la institución; entonces, me tuve que ver precisado a acudir al proceso, explicar como había sido el procedimiento y al no encontrar causal posible, fui absuelto”, concluyó.
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