José Ruiz Vega gestionará
ante el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) un presupuesto fijo para la
operatividad. "El objetivo es que no solo se ejecute el proyecto, sino que
también se mantenga. Para eso, hay que gestionar un área de operatividad y
mantenimiento, porque se asegure su sostenibilidad por ser de beneficio a la
provincia”, afirmó.
Con
el objetivo de no solo brindar una solución definitiva a las quebradas de
Trujillo, sino también que esta sea sostenible, el alcalde José Ruiz Vega se reunió con el congresista Diego Bazán y representantes de la Autoridad para la Reconstrucción con Cambios (ARC), para coordinar
acciones sobre el mantenimiento que se dará al proyecto que involucra a las
quebradas San Idelfonso y San Carlos, cuyos trabajos iniciarán a mediados de
este año.
"El
objetivo es que no solo se ejecute el proyecto, sino que también se mantenga.
Para eso, hay que gestionar un área de operatividad y mantenimiento, porque se
asegure su sostenibilidad por ser de beneficio a la provincia. Estamos
comprometidos para gestionar un presupuesto fijo para su permanencia en el
tiempo", expresó la máxima autoridad de la Municipalidad Provincial de Trujillo (MPT).
En
la reunión, también participaron el alcalde del distrito de Laredo, Miguel Chávez y el vicegobernador de La Libertad, Ever Cadenillas, quienes apoyaron la
medida. Además, las autoridades indicaron que se van adelantar a la gestión de
dicha área de mantenimiento antes que se concluya el expediente final y se
comience a ejecutar la obra. "Tenemos que unirnos para brindar solución
correcta a los problemas de las quebradas. Hay disposición del alcalde José
Ruíz para ir hasta Lima y buscar el financiamiento; todos los esfuerzos, son
bienvenidos", expresó Diego Bazán.
Se
estableció que, en los próximos días, se estaría viajando a la ciudad de Lima
para gestionar ante el Ministerio de Economía el presupuesto que se añadirá
cuando se entregue el expediente final para la ejecución de la obra, que
compromete a toda la provincia de Trujillo. Como se sabe, esta solución integral
permitirá mejorar la calidad de vida de los pobladores y, sobre todo, que las
quebradas se convertirán en una alternativa ecoturística.
Asimismo,
el proyecto incluye la construcción de diques transversales permeables de roca
en las quebradas para reducir la velocidad del flujo de agua y retener los
sedimentos que generan las lluvias y huaicos.
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