Fue justamente en el flamante local del IRO, ubicado en Natasha Alta, junto a la Corte Superior de Justicia de La Libertad, donde Estudiantes, médicos, autoridades regionales y trabajadores del IRO, le rindieron homenaje póstumo, destacando sus valores personales, profesionales y científicos.
Hondo pesar causo en el comunidad liberteña el deceso del médico oftalmólogo trujillano Ricardo Caceda Pérez, precursor de los trasplantes de corneas en el Perú. Sus alumnos, colegas médicos y el presidente del Gobierno Regional La Libertad, Ing. José Murgia Zannier, lo despidieron con honores ayer, hasta su última morada. Caceda Pérez, hasta antes de su deceso fue Director del Instituto Regional de Oftalmología de La Libertad (IRO) y catedrático de la Universidad Nacional de Trujillo.
Fue justamente en el flamante local del IRO, ubicado en Natasha Alta, junto a la Corte Superior de Justicia de La Libertad, donde Estudiantes, médicos, autoridades regionales y trabajadores del IRO, le rindieron homenaje póstumo, destacando sus valores personales, profesionales y científicos. Caceda Pérez, falleció el sábado último, víctima de un paro cardiaco. A lo largo de su vida profesional fue profesor de hasta 40 promociones en la Universidad Nacional de Trujillo y formo más de 5 mil médicos oftalmólogos. Aquí, en Trujillo, fue el primero en realizar un trasplante de cornea, al mando de un equipo médico especializado.
El presidente regional Jose Murgia Zannier, dijo que el doctor Ricardo Caceda fue un destacado profesional que hizo mucho bien silenciosamente, con excelencia y mirando al futuro, impartiendo enseñanzas que se iban multiplicando con el correr del tiempo, ayudo a muchas personas de bajas recursos económicos y fue el gestor de la imponente infraestructura que hoy tiene el IRO que brinda servicio médico a todo el norte del país. Recordó su persistencia y empeño para que este moderno local del IRO se haga realidad.
“Él lo visualizó para mejorar los servicios y todas las posibilidades educativas a nivel de residencia médica. Su ausencia la vamos a sentir, porque sus dotes personales, de académico y científico, de padre de familia, no lo vamos a tener cerca. Su ejemplo tiene que patentizarse como un camino a seguir”, subrayó. Previamente, el doctor Ricardo Caceda Pérez, recibió homenaje en la Facultad de Medicina. Posteriormente fue llevado hasta el cementerio Parque Eterno, donde se oficio una Misa de cuerpo presente y fue sepultado.
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