Indecopi evalúa implementar un Derecho Compensatorio a la importación de fibra de algodón proveniente de EE.UU., lo que significaría el incremento de su precio al ingresar al Perú, las prendas peruanas no podrán competir con productos de otros países como Bangladesh.
La posibilidad de que las confecciones cierren el año en un monto similar al del 2012 podría desaparecer ante la intención de implementar un Derecho Compensatorio a la importación de fibra de algodón procedente de EE.UU., que haría inviable la recuperación del sector, manifestó el presidente de la Asociación de Exportadores (ADEX), Sr. Eduardo Amorrortu Velayos.
Detalló que el principal problema del algodón peruano es su bajo rendimiento, razón por la cual solo cubre alrededor del 40% de la demanda de la industria nacional. Sin embargo, Indecopi interpreta que la contracción de la actividad algodonera obedece al hecho que el algodón norteamericano está subsidiado, generando una competencia desleal para el productor peruano.
Por ello se establecería un Derecho Compensatorio (o sobretasa arancelaria) de aproximadamente 10%. Esta medida incrementaría los costos de producción de las prendas de vestir y agravaría su débil posición en el mercado internacional. “Si se llega a publicar esa normativa proteccionista, el Perú cometería un error que no solo afectaría los despachos, sino que, además, no solucionaría el real problema que es la baja producción”, puntualizó Amorrortu.
Recordó que hace algunos años, un grupo de agricultores acudió a ese organismo supervisor por la misma causa y al final ésta fue desestimada. En ese sentido, llama la atención que se insista con esa iniciativa. “Si se aplica ese derecho compensatorio, se influiría negativamente en las hilanderías nacionales y a toda la cadena del sector confecciones que se vería obligadas a asumir un mayor costo que difícilmente podrán trasladar al comprador”, alertó.
Amorrortu Velayos aseguró que si se aplica el Derecho Compensatorio a la fibra del algodón procedente de EE.UU., lo que significaría el incremento de su precio al ingresar al Perú, las prendas peruanas no podrán competir con productos de otros países como Bangladesh. Inclusive afectaría el precio de las confecciones destinadas al mercado interno. Explicó que la solución es atacar los verdaderos problemas en el campo, tal y como lo considera el Ministerio de Agricultura y Riego (Minagri).
Ellos han entendido que la salida no es dar subsidios, sino trabajar en la implementación de prácticas agronómicas modernas, poseer mejores condiciones de riego, impulsar la asociatividad para un mayor rendimiento, entre otros. “La implementación de ese derecho compensatorio no es el camino apropiado para solucionar el problema de producción que tenemos, el cual se origina por la migración de los campos agrícolas a otros cultivos, el poco de uso de semillas certificadas y el comercio informal que rodea esa agricultura, entre otras razones”, advirtió.
Por otra parte, insistió en mantener el régimen laboral especial de las exportaciones No Tradicionales (D.L. 22342) porque contribuye a generar puestos de trabajo en función a los pedidos que tienen las empresas. “Nuestro objetivo es aportar al desarrollo nacional. No pueden existir empresas rentables en un país perdedor, trabajemos para que el Perú sea un país rico con empresas ganadoras”, culminó.
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