En su afán de apoderarse de estas tierras, difíciles para la agricultura, Nicolás Alberto Benites Ávila recurrió al teniente gobernador de los sectores Canseco y Mochal Alto y Bajo, Andrés Avelino Lázaro Collave, en busca de un certificado de posesión de las doce hectáreas aludidas. Pobladores se quejan de inacción policial.
En el sector Canseco, caserío Mochal, distrito de Poroto (provincia de Trujillo), un grupo de campesinos libra una titánica y silenciosa lucha: convertir las tierras eriazas en terrenos cultivables. Por si esto fuera poco, desde mediados del mes de febrero de este año deben enfrentar la amenaza de ser despojados de las tierras que con tanto esfuerzo han ganado para la agricultura.
Al más puro estilo gansteril, Nicolás Alberto Benites Ávila, con el apoyo de maquinaria pesada y de sujetos contratados para tal fin, ingresó a la fuerza en propiedad de Angelita García de Huamán, que tiene la conducción y posesión de su parcela desde mayo de 1995. El Juez de Paz de Única Nominación de Poroto, Erico Gonzáles Pérez, constató los daños a los canales y a las plantas que la maquinaria pesada hizo en propiedad de la denunciante.
En su afán de apoderarse de estas tierras, difíciles para la agricultura, Nicolás Alberto Benites Ávila recurrió al teniente gobernador de los sectores Canseco y Mochal Alto y Bajo, Andrés Avelino Lázaro Collave, en busca de un certificado de posesión de las doce hectáreas aludidas. El 8 de abril del año en curso, la autoridad política rechaza esa pretensión señalando, a través de un documento, que esa área “se encuentra en posesión de terceras personas, naturales del sector de la campiña de Canseco”.
En el sector Canseco, caserío Mochal, distrito de Poroto (provincia de Trujillo), un grupo de campesinos libra una titánica y silenciosa lucha: convertir las tierras eriazas en terrenos cultivables. Por si esto fuera poco, desde mediados del mes de febrero de este año deben enfrentar la amenaza de ser despojados de las tierras que con tanto esfuerzo han ganado para la agricultura.
Al más puro estilo gansteril, Nicolás Alberto Benites Ávila, con el apoyo de maquinaria pesada y de sujetos contratados para tal fin, ingresó a la fuerza en propiedad de Angelita García de Huamán, que tiene la conducción y posesión de su parcela desde mayo de 1995. El Juez de Paz de Única Nominación de Poroto, Erico Gonzáles Pérez, constató los daños a los canales y a las plantas que la maquinaria pesada hizo en propiedad de la denunciante.
En su afán de apoderarse de estas tierras, difíciles para la agricultura, Nicolás Alberto Benites Ávila recurrió al teniente gobernador de los sectores Canseco y Mochal Alto y Bajo, Andrés Avelino Lázaro Collave, en busca de un certificado de posesión de las doce hectáreas aludidas. El 8 de abril del año en curso, la autoridad política rechaza esa pretensión señalando, a través de un documento, que esa área “se encuentra en posesión de terceras personas, naturales del sector de la campiña de Canseco”.
No contento con esto, este desalmado sujeto ha presentado denuncia ante la Primera Fiscalía Penal de Trujillo contra varios de los verdaderos posesionarios con el propósito de amedrentarlos. Mediante un memorial, cincuenta vecinos del sector Canseco respaldan a los agricultores denunciados y acusan de usurpador a Nicolás Alberto Benites Ávila.
“Los vecinos de la zona nos conocen por que vivimos desde hace mucho tiempo aquí, esperamos que se haga justicia porque con su invasión este señor nos hace mucho daño y perjuicio”, señaló María Lucas Arroyo quien denunció asimismo que el usurpador tiene el apoyo de la Policía Nacional de Poroto, la que en un primer momento, no quiso recibir su denuncia.
“Los vecinos de la zona nos conocen por que vivimos desde hace mucho tiempo aquí, esperamos que se haga justicia porque con su invasión este señor nos hace mucho daño y perjuicio”, señaló María Lucas Arroyo quien denunció asimismo que el usurpador tiene el apoyo de la Policía Nacional de Poroto, la que en un primer momento, no quiso recibir su denuncia.
¿Intereses mineros?
Los denunciantes dejaron entrever que el usurpador, quien según el portal de la SUNAT declaró domicilio fiscal en la calle Sinchi Roca Nº 719 del distrito El Porvenir señalando ser albañil, tendría el apoyo de una empresa de minería no metálica interesada en el caolín que abunda en estos terrenos. Esta versión tendría asidero dado que en la zona, el empresario Francisco Sebastián Aredo Chávez formuló los petitorios mineros MAURICIO II – 2008 y MAURICIO III – 2008, rechazados por los pobladores del sector Tres Cruces de Poroto.
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