“Recordemos que antes
que los españoles nos invadieran teníamos una nación bien constituida que
abarcaba una extensión importante del planeta, eso era lo que se conoce como el
Tawantinsuyo y atravesaba la línea ecuatorial y el Trópico de Capricornio”, señala
Laureano Martínez Orccohuaranca.
El
conferencista cusqueño Laureano Martínez
Orccohuaranca, ideólogo y líder cusqueño radicado en La Libertad, planteó la posibilidad de recuperar los Derechos
Políticos, Ideológicos y Jurídicos de la Propiedad Territorial del Tawantinsuyo
contando con la participación de los 13 países que formaron parte del gran
Estado Incaico, que actualmente conforman los territorios de Perú, Ecuador, Bolivia, Chile, Argentina, Paraguay, Uruguay, Venezuela, Brasil, Colombia, Guyana, Surinam y Guayana.
“El
punto de partida es tomar las banderas para recuperar el Derecho de Propiedad
del Tawantinsuyo, cuyo territorio abarcaba una extensión de 17 millones 819,100
Km2, es decir, el 12% de la corteza terrestre, con una longitud de 7,400 Km2,
llegando a abarcar 7,400 km en su punto más ancho. Esta integración se tendría
que realizar a través de tres etapas”, asegura el ideólogo cusqueño.
Seguidamente,
agregó que la primera etapa será para un nuevo orden y estaría integrada por
cuatro países: Perú, Ecuador, Bolivia y Chile, que conformarían la Capital del
Tawuantinsuyo; la segunda etapa la conformarían la integración de Argentina,
Paraguay, Uruguay y Venezuela; y la última etapa la integrarían los países de
Brasil, Guyana, Surinam, Colombia y Guayana.
“Recordemos
que antes que los españoles nos invadieran teníamos una nación bien constituida
que abarcaba una extensión importante del planeta, eso era lo que se conoce
como el Tawantinsuyo y atravesaba la línea ecuatorial y el Trópico de Capricornio;
en este territorio se respetaba en Derecho de Propiedad, el cual debería de
recuperarse tal y conforme funcionaba, adecuándolo a la modernidad y
fusionándolo con el Estado de Derecho que nos rige actualmente, de esta forma tendríamos
un Estado mucho más eficiente y que defienda nuestros intereses”, sentenció.
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