Se han filtrado a la prensa documentación que demostraría que se está haciendo mal uso de esta institución, cuya misión es la ayudar a niños cuyos padres se encuentran el estado de pobreza o extrema pobreza; sin embargo, se estaría beneficiando a hijo de alta funcionaria que percibe la nada despreciable suma de 2,800 soles.
Una alta funcionaria de la Sociedad de Beneficencia Pública de Trujillo logró que esta institución le otorgue una vacante a su menor hijo en la Cuna Maternal “Josefina Pinillos de Larco”, cuando este apoyo social es para madres de familia en situación de pobreza o extrema pobreza. Este caso se conoce al interno de la institución desde enero del 2017, cuando la Gerente General de entonces, Regina Pacheco, toma conocimiento que la recién nombrada Jefa de Patrimonio Inmobiliario, bajo la modalidad de CAS directivo, y con un sueldo de 2,800 soles mensuales, la abogada Claudia Esquivel Alfaro, tenía a su menor hijo ocupando vacante en la Cuna Maternal.
Ante ello pide un informe a la Lic. Giulliana Loloy Vela, Director de Desarrollo Social –que ya no labora en la institución, la cual remite un informe en que da cuenta que el 14 de noviembre del 2016 la mencionada profesional ingresa una solicitud de vacante para su menor hijo A.D.E. (4), de inmediato se genera el informe social N° 266-2016-SBP/USA-TS, en el que a pesar de tener conocimiento que la madre –que en ese momento no laboraba para la Beneficencia- tenía un ingreso superior al mínimo vital pero se consideraba que “el trabajo de locación de servicios es ESPORÁDICO, y que ella es la única persona que se hace cargo de todos los gastos del niño”.
Asimismo, invoca el reglamento que señala que uno de los requisitos para el apoyo es “dar prioridad a niño que no cuente con figura paterna o materna”, por lo que finalmente el informe sugiere brindarle apoyo en los días que resta del 2016 y otorgarle vacante 2017, “a fin de que la madre logre una estabilidad laboral y emocional”. Sin embargo, el objetivo central de la Cuna Maternal Josefina Pinillos de Larco es clarísimo: “Atender, cuidar y prestar apoyo a niños de 1 a 5 años de edad, en condición de pobreza o extrema pobreza, procedentes de hogares desintegrados de zonas urbano marginales.
Como es de imaginarse, estos pequeños generalmente son hijos de madres dedicadas a trabajos temporales, a quienes se les presta el apoyo en educación, alimentación, salud, recreación y protección. Del texto del informe, se trasluce que para favorecer a esta señorita y darle la vacante -que en la práctica no le correspondía- se utilizaron palabras sueltas de los requisitos, el abandono de hogar del padre y se dejaron de lado otros requisitos claves, como estar en pobreza o extrema pobreza, por lo que su hijo obtiene desde el año pasado un cupo que le corresponde a un niño que si lo necesita.
La abogada tiene un servicio de asesoría legal en redes sociales, y se presenta como una profesional “Con diez años de trayectoria profesional, desempeñando diversos cargos y funciones. En la actividad privada, mediante el ejercicio profesional de la abogacía, como abogado litigante en las especialidades de derecho de familia, civil, penal y constitucional. En la actividad pública, como abogada en los despachos administrativos como funcionaria pública de Alta Dirección y otros”; no es precisamente una madre en extrema pobreza, como tampoco lo demuestran las fotos que cuelga en las redes.
Pero ni la gerente ni nadie pudo revisar este caso, menos el Presidente de la Beneficencia de entonces, Marcelo Américo Valdiviezo, quien renunció al poco tiempo, asumiendo el cargo José Luis Castillo Silva. Al parecer la abogada tendría grandes e influyentes amistades, que le habrían permitido obtener esta vacante, pues incluso al ser nombrada funcionaria ya esa vacante era éticamente improcedente y debió anularse. (Con información de Agencia IP Norte)
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