Hidrandina capacitó a
las autoridades políticas para que subsidio llegue a familias pobres de esta
jurisdicción, así como en prevención de riesgos eléctricos. 1,759 beneficiarios
corresponden a la ciudad de Cajamarca; 427 a Cajabamba; 399 a la provincia de
Celendín; 308 a San Marcos; 298 a San Miguel; 174 a Contumazá y 159 a San Pablo.
Tres
mil quinientos veinticuatro hogares, de escasos recursos económicos, se han
beneficiado hasta la fecha del Fondo de
Inclusión Social Energético (FISE) en el departamento de Cajamarca, consistente en un bono de 16
soles para la adquisición de un balón de gas que le otorga el Gobierno Peruano,
como subsidio, a las familias en situación de pobreza, a nivel nacional. Así lo
reveló el Dr. Leonardo Chumbes Campos,
Jefe del FISE – Hidrandina, durante la exposición que ofreciera recientemente a
los subprefectos provinciales, así como a los tenientes gobernadores de la
ciudad de Cajamarca y de sus diversas provincias, en el local de la Prefectura
Regional.
De
esa cantidad 1,759 beneficiarios corresponden a la ciudad de Cajamarca; 427 a Cajabamba; 399 a la provincia de Celendín; 308 a San Marcos;
298 a San Miguel; 174 a Contumazá y 159 a San Pablo. El funcionario explicó que para ser beneficiario del
FISE se requiere que el usuario esté registrado en el Sistema de Focalización de Hogares (SISFOH) y que su consumo del
servicio de energía eléctrica que mensualmente le llega sus viviendas, no supere
los 30 kilowatts; de igual manera que en el área de su jurisdicción geográfica
no se cuente con gas natural, así como ningún proyecto en vías de ejecución de
gas natural residencial en su distrito.
De
igual manera especificó que la persona debe estar debidamente identificada por
el Registro Nacional de Identificación y
Estado Civil (RENIEC) y su ingreso anual no debe superar los 18 mil soles
anuales, según reportes de la Superintendencia
Nacional de Administración Tributaria (SUNAT). Es decir, la evaluación y
fiscalización para determinar a los reales beneficiarios del FISE son
consultadas con el SISFOH e instituciones como la SUNAT y la RENIEC. Asimismo,
se capacitó sobre prevención de riesgos eléctricos para evitar accidentes de
origen eléctrico en el interior de los hogares, así como para fortalecer una
cultura de seguridad en la comunidad.
Refirió
que las instalaciones eléctricas internas deben ser revisadas periódicamente a
cargo de un técnico calificado toda vez que cuando el conductor ha cumplido su
ciclo de vida útil tiende a deteriorarse y en tal sentido va a ocasionar fuga
de energía, lo cual es un riesgo; asimismo recordó que un conductor de buena
calidad, que asegure una duración estándar en el tiempo, es mucho mejor que un
cable que tiende a deteriorarse rápido. Respecto a las distancias mínimas de
seguridad (DMS) que los propietarios de los predios están obligados a respetar,
por norma técnica, puntualizó que muchas personas, por tener una actitud
negligente, y preferir la informalidad, trasgreden la norma.
Dicha
norma establece una distancia de 2.5 metros, de manera horizontal, desde el
límite de propiedad hasta los conductores eléctricos aéreos de baja y media
tensión. En tal sentido, precisó que el propietario al construir sacando el
alero, acorta esa distancia reglamentaria y en consecuencia el riesgo de una
electrocución se incrementa.
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