“Vamos a hacer un examen nacional a más de 180,000 profesores, acuérdense que el año pasado para que no dieran examen hubo huelga de un mes, ahora todos piden examen y no tercio superior; pues examen tendrán pero riguroso para que no se pase ningún ocioso o incapaz”, manifestó.El Presidente de la República, Alan García Pérez, afirmó esta mañana que 180,000 maestros rendirán un examen nacional que será riguroso y sin favoritismos para comprobar la calidad de los docentes y ver si merecen ser contratados como profesores del sector público. “Los mejores maestros son aquellos que demuestran en el examen sus calificaciones y el orden será riguroso, no hay carné partidario, no hay compadrazgo político nacional ni regional, no hay favoritismo para el pequeño partido regional del pueblo”, anotó.
Refirió que el examen será tomado por los representantes de la Escuela Superior de Administración de Negocios (ESAN) y con la vigilancia máxima para que nadie haga “trampa”. “Vamos a hacer un examen nacional a más de 180,000 profesores, acuérdense que el año pasado para que no dieran examen hubo huelga de un mes, ahora todos piden examen y no tercio superior; pues examen tendrán pero riguroso para que no se pase ningún ocioso o incapaz”, manifestó durante el acto de presentación del Plan Estratégico Multianual del Sector Educación.
Mencionó que el orden del examen será riguroso para aquellos maestros que saquen 20 hasta el que saca cero y “vamos a poder ver cual es la calidad final de los que quieren ser contratados como profesores del Estado”. Asimismo, manifestó que el Ministerio de Educación ha venido trabajando en medio de incomprensiones, principalmente por el Sindicato Unitario de Trabajadores en la Educación del Perú (Sutep) que está “politizado lamentablemente”.
“El viejo sindicato pertenece a un solo partido político sin mucho éxito electoral pero que tiene un modo de expresión sobre la sociedad, arrastrando a muchísimos maestros que no forman parte de ese movimiento político, a través del sindicato”, indicó. Recordó que el Sutep se opuso primero a los exámenes cuando el Ejecutivo planteó el año pasado una evaluación general a todos los profesores e inclusive realizaron una huelga general de mucho tiempo.
“Pero tuvieron que aceptar por la presión del país que esto era importante para saber que sabe cada uno de los profesores y que puntos flacos tiene porque no todos los profesores han salido de universidades públicas y privadas”, enfatizó. Indicó que una de las cosas malas y pésimas que hizo la dictadura de la década de los 90 fue facultar y habilitar que en todos los departamentos y provincias se crearan hasta 480 instituciones educativas normales para formar maestros.
“Pero se crearon sin supervisión, sin condiciones y exigencias, se crearon de manera mercantil para cobrarle al alumno que se inscribe y darle título cobrándole también”, cuestionó. En ese sentido, señaló esta defectuosa proliferación de 480 instituciones pedagógicas ha terminado generando “un magisterio que no tiene calificaciones nacionales y lo peor es que cada uno de esas instituciones ha dado títulos a nombre de la Nación.
“Eso no es posible porque la Nación solo puede dar títulos a quien esta debidamente capacitado, evaluado y probado”, remarcó. En ese sentido, resaltó el coraje y la dureza del ministerio para cerrar muchas de esas “seudo” instituciones pedagógicas y estableciendo un examen nacional para quienes salen de esas instituciones para verificar y probar sin efecto saben algo.
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