DECANA DE OBSTETRICES SALUDA POR EL DÍA INTERNACIONAL DE LA MUJER

La igualdad entre los géneros y la potenciación de la mujer son instrumentos decisivos para el desarrollo sostenible, afirma la Decana del Colegio Regional de Obstetras III Lima Callao, Tula Zegarra Samamé, quien nos encargo hacer público su saludo en esta fecha tan especial.

En la Cumbre Mundial 2005, los gobiernos de todas las naciones acordaron que “el progreso de la mujer es el progreso de todos”. Sin embargo, hoy en día persiste una gran brecha entre la normativa y la práctica. La falta de voluntad política se hace patente de la forma más reveladora: falta de recursos. Es el momento de que este Día Internacional de la Mujer sea también el día de la inversión en las mujeres.

Entendamos entonces esta inversión como la mejora en productividad y mejora en el aspecto económico, la misma que promoverá medidas tanto más importantes como mejoras en la educación y salud, la prevención del VIH/SIDA y como política infalible para mejorar la nutrición o reducir la mortalidad maternoinfantil. Es cierto que hemos progresado al incrementar el empleo de la mujer o intensificando su papel en el quehacer cotidiano del país, pero eso no basta.

Todos los que integramos la comunidad -gobierno, organizaciones no gubernamentales, instituciones públicas y privadas- hemos de sacar cuenta de las incalculables pérdidas que nos genera a todos la persistente desigualdad entre los géneros. Este día ofrece una oportunidad para que todos nos unamos en pro de una causa que toca a toda la humanidad.

Darle el verdadero valor a la mujer no es sólo un objetivo en sí mismo, sino una condición indispensable para mejorar la vida de todos. Nadie puede negar y discutir los resultados de la Cumbre Mundial 2005, en donde los dirigentes del mundo reafirmaron que la igualdad de género y los derechos humanos para todos son imprescindibles para el desarrollo, la paz y la seguridad.

Sin embargo, aún estamos muy lejos de convertir ese entendimiento común en práctica universal. En casi todos los países las mujeres siguen ocupando lugares ajenos a la toma de decisiones, por tanto se convierte en un trabajo subvalorado. Esto sin contar que de los miles de niños que no asisten al colegio la mayoría son niñas. Lo más grave es que la violencia contra las mujeres y niñas persiste, y con efectos devastadores en sus vidas, sus familias y toda la sociedad.

La mayor parte de las sociedades prohíben esa violencia, pero en la realidad muchas veces se encubre o sólo se tolera. Así pues, estamos resueltos a promover la igualdad entre los géneros y la potenciación de la mujer como instrumentos decisivos para luchar contra la pobreza y la enfermedad y para lograr un desarrollo verdaderamente sostenible.

Por eso es importante recordar en el Día Internacional de la Mujer, la responsabilidad que nos asiste de esforzarnos en pro de un cambio duradero de los valores y las actitudes. Este Día nos debe llama a trabajar en alianza con los gobiernos, las organizaciones públicas y el sector privado. Nos insta a procurar una transformación de las relaciones entre mujeres y hombres en todos los niveles de la sociedad.

Las instituciones como el Colegio Regional de Obstetras de Lima Callao deben ir a la vanguardia de estos esfuerzos. Por ello, asumimos nuestro compromiso de hacer cuanto esté a nuestro alcance para que así sea, no sólo en el Día Internacional de la Mujer, sino cada día. En este Día Internacional de la Mujer unámonos en esa misión.