Los cultivos afectados hasta el momento por las tardia avenida de aguas en el río Moche, son los cultivos de frijoles, arvejas, verduras, maíz, piña y palta entre los principales cultivos afectando negativamente la precaria economía de los agricultores, según reveló Américo Contreras Méndez.
Los cultivos de pan llevar ubicados en la parte alta de la cuenca del río Moche son los más afectados por la ausencia de caudal en el río Moche a cauda del tardío inicio de la temporada de lluvias en el interior de nuestra región, reveló el presidente de a Junta de Usuarios del distrito de Riego Moche, Sr. Américo Contreras Méndez. Fue durante una reunión con dirigentes de las comisiones de regantes desarrollada en su local institucional, donde el dirigente agrario declaró que los cultivos son sembrados por pequeños agricultores en la parte alta, que corresponde a Samne 1,500 hectáreas y al distrito Poroto con 2,200 hectáreas de cultivos.
Los cultivos afectados hasta el momento por las tardia avenida de aguas en el río Moche, son los cultivos de frijoles, arvejas, verduras, maíz, piña y palta entre los principales cultivos afectando negativamente la precaria economía de los agricultores. La ausencia de agua en el río Moche obligó a una severa ración del agua proveniente de filtraciones para destinarla al regadío, sin descuidar la prioridad del agua de filtraciones, destinadas al consumo humano de los centros poblados, dijo.
De otra parte, Contreras Méndez aclaró que el agua racionada solo se destina a los agricultores que están calificados para recibir el agua de licencia, mientras que los otros agricultores con sembríos en áreas de permiso, no reciben el agua de regadío, para no haber disponibilidad y conocer, que el agua que reciben son volúmenes excedentes. Asimismo, recordó que un severo racionamiento de agua para los cultivos, y discriminar en dar agua para áreas de licencia y no otorgarlas para áreas de permiso, según nuestra normatividad, siempre ocasiona infundadas contrariedades, pero deben comprender que es la naturaleza, la que determina estas medidas.
También existe temor latente entre los agricultores del Valle Santa Catalina, ante posible presencia de un Fenómeno del Niño, que ocasionaría daños por desborde del río, por extraordinarias precipitaciones pluviales, al no haberse culminado las obras de defensa ribereña previstas en un plan de contingencia.
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