En el área
de Idiomas participaron sus 20 estudiantes. Se simuló dos heridos, debido a la
dificultad para descender las escaleras. Una estudiante recibió contusiones en
el brazo derecho y otra en la pantorilla derecha. Además otra se desmayó. El
simulacro de grado 8 dispuesto por el Gobierno Nacional.
“Los desastres no son naturales, son efectos
de una problemática social, por lo tanto debemos trabajar para impedir que
nuestra vulnerabilidad siga en aumento y así evitar la construcción de
desastres”, declaró la docente de Idiomas de la Universidad Nacional de Trujillo (UNT) y directora de SOS Vida Perú, Sra. Sonia Reyes Flores, durante la
realización del simulacro de sismo en la Ciudad Universitaria. Añadió que los
sismos son eventos naturales, pero los daños se pueden evitar con medidas de
prevención, pero cuando no se tiene un manejo adecuado se ocasionará un
desastre.
En el área de Idiomas participaron sus 20
estudiantes. Se simuló dos heridos, debido a la dificultad para descender las
escaleras. Una estudiante recibió contusiones en el brazo derecho y otra en la
pantorilla derecha. Además otra se desmayó. El simulacro de grado 8 dispuesto
por el Gobierno Nacional, mediante la Resolución Ministerial Nº 087-2012-PCM, fue
acatado por la Universidad Nacional de Trujillo tanto en su Local Central como
en la Ciudad Universitaria, realizándose en su mayoría los desplazamientos a
zonas seguras y formando círculos de vida.
El rector UNT, Dr. Orlando Velásquez Benites, comunicó semana atrás la necesidad de
construir una cultura de prevención frente a los desastres y atención de
emergencias. De esta manera, los decanos, gerentes y jefes de oficina establecieron
las rutas de evacuación del personal académico, administrativo y alumnos, con
un plazo de retorno a sus puestos de trabajo o aulas de 30 minutos. “Hemos
comunicado a las unidades y áreas de cada facultad, para que ubiquen zonas de
seguridad externa con asesoramiento del director del Instituto de Investigación
en Desastre y Medio Ambiente, Ing. Segundo
Seijas Velásquez”, manifestó la autoridad universitaria.
La alumna del cuarto año de Educación UNT, Stefanía Aquino Aldave informó que
estaba en la biblioteca cuando escucharon la alerta de una sirena y salieron al
área más segura, como es el área de Humanidades. En el caso del docente del
curso de Antropología Filosófica, José
Becerra Castañeda también destacó la realización de este simulacro en la
Ciudad. Aquí participaron la totalidad de los alumnos de primer ciclo de
antropología que formaron círculos de vida en las zonas libres de la Facultad
de Ciencias Sociales.
Más adelante, la profesora de Ecología Angelita Cabrera acató el simulacro con
todos sus alumnos del tercer ciclo de Ciencias de la Comunicación; igualmente
los alumnos de Historia del profesor Ángel
de la Cruz, quien dijo que felizmente las escaleras son anchas, pero
reclamó que los simulacros se den con mayor frecuencia. Alto nivel de
acatamiento se registró entre los alumnos y docentes de la Facultad de Ciencias
Económicas. Y en la Facultad de Ingeniería se acató en un 90 por ciento desde
el personal del Decanato y los alumnos. Alrededor de 300 alumnos salieron
ordenadamente a las zonas descampadas.
Ahí los docentes impartieron charlas
informativas sobre prevención durante la media hora previsto para el simulacro.
El decano de Ingeniería, Dr. Donato
Cárdenas Alayo dijo que se constató junto al responsable de Defensa Civil
de la UNT zonas estrechas y en el local antiguo de la Facultad, las mismas que
se evitará usar en el futuro. Cárdenas, quien participó en el primer mapa de
peligros junto a Machado y Seijas, dijo que en Trujillo se debe exigir que los
nuevos edificios se construyan con materiales de calidad, porque se ha
detectado que en algunos lugares se usan mezclas con materiales desmenuzables y
fierros de diámetro no adecuado.
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