Jefe de Estado encabezó ceremonia por XX Aniversario de Operación Chavín de Huántar y Día del Valor Militar. El mandatario sostuvo que, 20 años después de dicha gesta militar, el Perú “necesita paz”, pero subrayó que “la paz no se hace solo con declaraciones, sino con actos”, como lo demostraron los comandos y los propios rehenes.
El Perú triunfará frente a los desafíos que vendrán en el futuro, tal como lo hizo recientemente ante los desastres naturales, y hace 20 años con la operación Chavín de Huántar, sostuvo el presidente Pedro Pablo Kuczynski, al encabezar una ceremonia por el aniversario de dicha acción militar. Durante el acto que tuvo lugar en la réplica de la Residencia del embajador del Japón, ubicada en la Avenida Las Palmas, Chorrillos, el mandatario dijo estar seguro que, con “disciplina y organización”, el país afrontará con éxito los retos que “lamentablemente” se presentarán.
“Tenemos que voltear la página, siempre va haber problemas, ahora la Fuerza Armada, la Policía y los bomberos han hecho una tarea ejemplar en la lucha contra los aludes y los huaicos, tendremos otros retos, pero estoy seguro que triunfaremos”, aseguró. El jefe de Estado presidió la ceremonia por el XX Aniversario de la Operación Chavín de Huántar y Día del Valor Militar, en que se recordó la valentía del personal militar que participó en la operación de rescate de los 72 rehenes de la residencia del embajador del Japón, ocurrida el 22 de abril de 1997.
En su discurso, resaltó que los comandos Chavín de Huántar hicieron en aquella oportunidad un “gran sacrificio por el Perú”, y el gobierno de ese entonces “se portó de manera eximia al organizar esta operación”. “Lo importante no solo es haber rescatado a los 72 herenes, sino es haber rescatado al Perú, porque con el gesto y la gesta de Chavín de Huántar se le dio el último clavo en el ataúd del terrorismo. Fue un gesto importantísimo, por eso estuvimos ayer en Palacio (condecorando al estandarte de la operación militar) y por eso estamos aquí hoy”, manifestó.
El mandatario sostuvo que, 20 años después de dicha gesta militar, el Perú “necesita paz”, pero subrayó que “la paz no se hace solo con declaraciones, sino con actos”, como lo demostraron los comandos y los propios rehenes, que sufrieron un cautiverio de 126 días a manos de miembros del Movimiento Revolucionario Túpac Amaru. La ceremonia contó con la presencia del titular del Poder Judicial, Duberlí Rodríguez; y de los ministros de Defensa, Jorge Nieto; Relaciones Exteriores, José Luna; Justicia, Marisol Pérez Tello; y Agricultura, José Manuel Hernández.
Asimismo, estuvieron presentes los legisladores Gino Costa y Carlos Tubino; el embajador de Japón, Tatsuya Kabutan; la hija del exmandatario Alberto Fujimori, Keiko Fujimori; y los ex rehenes Luis Giampietri y Francisco Tudela. De igual manera, asistieron el jefe del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, almirante José Paredes Lora; y los comandantes generales del Ejército, Gral. Luis Ramos Hume; Marina de Guerra del Perú, almirante Gonzalo Ríos Polastri; de la Fuerza Aérea del Perú, general FAP Javier Ramírez Guillén.
Durante el acto, se impuso la condecoración Cruz de Guerra al Valor en el grado de Honor a los comandos Chavín de Huántar, en actividad y en situación de retiro, por la entrega y coraje demostrados en el rescate. En nombre del capitán Raúl Jiménez Chávez y coronel Juan Valer Sandoval, fallecidos durante la operación, sus familiares recibieron la distinción de manos del propio jefe de Estado. La madre del capitán Raúl Jiménez, María Chávez de Jiménez; y el hijo del coronel Juan Valer Sandoval, Giovanni Valer Collado, recibieron la distinción.
Asimismo, el ministro de Defensa, Jorge Nieto, entregó un diploma al vicealmirante (r) Luis Giampietri, en representación de los ex rehenes. Hubo también un toque de silencio en memoria de los caídos y colocación de ofrendas florales. El discurso de agradecimiento estuvo a cargo del Gral. EP César Astudillo Salcedo, quien es el miembro en actividad más antiguo de la operación Chavín de Huántar.
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