martes, 22 de diciembre de 2009

1,500 NIÑOS CELEBRARON LA NAVIDAD CON EL ARZOBISPO

En horas de la mañana, y siempre en ambiente de espíritu navideño, el Arzobispo de Trujillo y Presidente de la Conferencia Episcopal Peruana, Mons. Miguel Cabrejos Vidarte, OFM, celebró la Navidad con más de 400 niños enfermos del Hospital Belén de Trujillo.

Una inolvidable fiesta de Navidad es la que disfrutaron la tarde de ayer, cerca de 1500 niños del distrito de La Esperanza, con el Arzobispo Metropolitano de Trujillo, Mons. Héctor Miguel Cabrejos Vidarte OFM, quien llegó hasta este alejado sector de la ciudad, para compartir con ellos la gran alegría y amor en respuesta al Nacimiento de Jesucristo. La jornada se inició con el Show de animación de música cristiana y de interpretaciones de villancicos, despertando el júbilo en los niños que se apostaron en la Institución Educativa Las Palmeras de Wichanzao.

Luego de la escenificación del Nacimiento de Jesús, el pastor de la grey liberteña, presidió la Paraliturgia, continuándose con el compartir. Seguidamente, todos los niños y niñas desfilaron ordenadamente, para recibir de manos del Arzobispo un presente como signo a la felicidad navideña. “La Navidad es un momento especial se acercamiento, especialmente, a los niños. El niño es niño, ciertamente que la Navidad es Jesús, pero fundamentalmente el niño representa un regalo, un presente, como signo al gran regalo que nos hizo Dios en Jesús”, sostuvo monseñor Cabrejos Vidarte.

A esta noble labor pastoral, en pro de la felicidad de los niños dentro de una fecha muy especial, cooperaron, el personal docente y administrativo de la Universidad Católica de Trujillo, la Oficina Diocesana de Educación Católica (ODEC), la Institución Educativa “Las Palmeras” y fieles de la parroquia “San Juan María Vanney”.

También visitó a niños enfermos

En horas de la mañana, y siempre en ambiente de espíritu navideño, el Arzobispo de Trujillo y Presidente de la Conferencia Episcopal Peruana, Mons. Miguel Cabrejos Vidarte, OFM, celebró la Navidad con más de 400 niños enfermos del Hospital Belén de Trujillo. Después de la Paralitúrgia, el Pastor de Trujillo, recorrió las áreas de Maternidad, Pediatría, Unidad de Quemados y de Cuidados Intensivos entregando juguetes y panetones a diversos niños y niñas de todas las edades que sufren en este nosocomio.

Durante la entrega, monseñor Cabrejos invitó a los presentes a encontrar el significado de la Navidad: “La invitación es que nosotros debemos aprender a que Cristo nazca en nuestro corazón y en nuestra vida. No tiene ningún sentido si no trascienden lo acontecimientos humanos que hacemos”, refirió el prelado.

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