Con la finalidad de combatir las pérdidas de energía la Unidad de Control de Pérdidas de Hidrandina con el debido respaldo policial realiza intensos operativos anticlandestinaje en diversos sectores, como el recientemente realizado en El Porvenir, Alto Trujillo, El Milagro, entre otros. En los mencionados lugares, el robo de energía sobrepasa los 29 mil nuevos soles, ocasionando serio daño a la empresa, perjudicando las obras en beneficio de nuevas familias que urgen del elemental servicio.
Funcionarios de la empresa eléctrica, informaron que un aproximado de 161 famílias se beneficiaron ilícitamente, no solo con conexiones clandestinas sino que llegan al extremo, de revender la energía que roban de Hidrandina. De igual modo señalaron que en estos casos se procedió al corte e incautación del material ilícito, por un total de 122.5 k de conductor telefónico, TW y mellizo de las conexiones clandestinas el cual fue ingresado al almacén de Patio Norte.
En estos casos, tal como lo señala la ley y los reglamentos de seguridad, se procede inmediatamente al corte del servicio, en aplicación de la Ley de Concesiones Eléctricas 25844 se hace sin presencia de autoridad alguna (incluso sin la presencia de la Policía Nacional). Asimismo informaron que el Código Penal en su artículo 185 define el robo y uso clandestino de electricidad como delito contra el patrimonio y lo reprime con prisión, no menor de un año ni mayor de tres.
Funcionarios de la institución señalaron que el hurto de energía también se esta dando en zonas residenciales como por ejemplo en algunas construcciones nuevas (edificios multifamiliares). De igual modo, solicitaron que las autoridades correspondientes, en el marco de la ley y las normas vigentes, cumplan con atender desde sus atribuciones y responsabilidades este problema que si bien es social debe ser atendido en su real magnitud, pues nada justifica el hurto de energía.
Cabe señalar que en estos casos Hidrandina, en el marco de la ley de concesiones, permite la superación de estos problemas abriéndoles las puertas a los moradores a su formalización mediante el suministro provisional y el suministro temporal. Entre los intervenidos se mencionó a Segunda Olga Guzmán Rodríguez (vulneración del suministro y conexión directa a la bornera del medidor); María Apolitano Angulo (conexión clandestina de la red) y Antero Rodríguez Horna (conexión clandestina de la red).
Según se supo, todos ellos residen en el Centro Poblado Alto Trujillo 2ª, de igual modo, Santos Paulo Quiroz Chacón, Máximo Arroyo García, Luz María Olaya Valdiviezo, estos últimos de El Milagro, intervenidos por reventa de energía.
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