“En el sector
azucarero ha existido interés por desarrollar un conjunto de iniciativas
sociales en beneficio de los sembradores de caña, pues mantener una buena
relación con este grupo de agricultores se ha convertido en un factor
estratégico en el sector”, acotó Carlos Mauricio Arias.
Los
pequeños agricultores, responsables de producir alrededor de nueve millones de
toneladas métricas de caña de azúcar cada año, que hasta hace poco constituían
el eslabón más débil de la cadena de producción por su precaria situación
económica y social, son hoy los principales proveedores de materia prima para
la industria azucarera, según afirma Carlos
Mauricio Arias, Gerente de Campo de la Empresa
Agroindustrial Laredo.
El
funcionario azucarero señala que la privatización del sector en la década de los
90 es el gran impulsor del repunte del sector azucarero en el país, y este
crecimiento significó que las empresas requirieran cada vez mayores volúmenes
de caña de azúcar y ofrezca mejores precios y condiciones a los sembradores por
la caña de azúcar, pues una buena parte de la producción de los ingenios y
agroindustriales ahora depende en una considerable proporción del volumen de
caña que puedan adquirir de los agricultores locales.
“En
el sector azucarero ha existido interés por desarrollar un conjunto de
iniciativas sociales en beneficio de los sembradores de caña, pues mantener una
buena relación con este grupo de agricultores se ha convertido en un factor
estratégico en el sector”, acotó Mauricio Arias. Dijo que, con el aporte del
capital privado, se realizan programas de desarrollo social dirigidos a los
sembradores (educación, salud y deporte).
Ellos
generan un impacto favorable en la mejora en la calidad de vida de estos
productores agrícolas y sus familias, y que otras empresas enfocan sus acciones
de responsabilidad social en desarrollar las capacidades técnicas de los
sembradores. Mauricio Arias informó que, en el 2011, la utilidad neta de las
principales empresas azucareras creció entre 15% y 30%, con relación a similar
período del año 2010, y que la rentabilidad alcanzada por las azucareras en la
Bolsa de Valores de Lima fue de alrededor de 7%, crecimiento.
Esto
se debe en gran medida al aporte de los sembradores con materia prima, así como
al incremento sostenido de los precios internacionales del azúcar desde el
2009. “La iniciativa de Agroindustrial Laredo, que podría ser replicada por
otras agroindustriales, se orienta a contribuir al desarrollo de los
sembradores mediante la provisión de créditos financieros, préstamos en
semilla, asesoría técnica y apoyo para su proceso de formalización y de
inscripción como contribuyentes”, aseguró.
En
la actualidad, el programa beneficia a cerca de 800 familias de los valles de Virú, Santa Catalina, Chicama,
Poroto, Chao, Santa y Barraza, que producen más de 4
millones 700 mil toneladas de caña de azúcar. A la fecha, la azucarera laredina
ha adquirido a estos agricultores cerca a 3 millones de toneladas de caña de
azúcar, por un valor estimado en más de 280 millones de soles.
Hasta
fines del año pasado, el programa proporcionó a sembradores locales cerca de
3,722 créditos, entre anticipos en efectivo, préstamos en semillas y préstamos
en efectivo por un valor total de 14’077,402 dólares y 34’677,648 nuevos soles.
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