Durante la Eucaristía, el pastor arquidiocesano agradeció el trabajo pastoral de cada uno de los sacerdotes, y los invitó a “celebrar siempre con plenitud y profundidad este Triduo Pascual que empezamos para gloria de Cristo, nuestro Señor”, expresó la autoridad religiosa, luego de pedir a los fieles fuertes aplausos para ellos.
Los sacerdotes y religiosos que trabajan en la Arquidiócesis Metropolitana de Trujillo renovaron el Miércoles Santo, sus promesas sacerdotales, asumidas el día de su Ordenación Sacerdotal, durante la Misa Crismal, en la Basílica Catedral, presidida por el Arzobispo de Trujillo, Mons. Miguel Cabrejos Vidarte OFM. Fue a los pies de la sagrada imagen del Señor de los Milagros, donde los presbíteros permanecieron acompañados de sus diversas comunidades parroquiales, como una muestra de cercanía hacia ellos, pues la presencia y oración de los laicos en esta Eucaristía, es un signo concreto de comunión eclesial y una manifestación de veneración al incomparable don del sacerdocio ministerial.
Durante la Eucaristía, el pastor arquidiocesano agradeció el trabajo pastoral de cada uno de los sacerdotes, y los invitó a “celebrar siempre con plenitud y profundidad este Triduo Pascual que empezamos para gloria de Cristo, nuestro Señor”, expresó la autoridad religiosa, luego de pedir a los fieles fuertes aplausos para ellos. Durante esta celebración de miércoles santo, el Arzobispo también bendijo el Óleo de los catecúmenos, el Óleo de los enfermos y consagró el Santo Crisma, que han de usarse para la administración de sacramentos del Bautismo, Unción de los enfermos, Confirmación y Ordenación sacerdotal, respectivamente.
La Misa Crismal culminó con la tradicional fotografía del recuerdo sobre el altar mayor de la Basílica Catedral, momento que fue registrado por fieles llegados de todas las parroquias arquidiocesanas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario