Durante la ceremonia de bendición el Arzobispo recordó que “Cristo es la luz del mundo y quien lo sigue no caminará en tinieblas, es por eso que en la navidad siendo la presencia del Niño Dios entre nosotros, el Emanuel, se llenan de luces y colores las casas, las tiendas, las calles, las plazas”.
Una exhibición multicolor de árboles artificiales se vive en la Plaza de Armas de Trujillo luego que el Arzobispo de Trujillo, Mons. Miguel Cabrejos Vidarte OFM., bendijera y pusiera inicio al XVI festival de luces y colores. En medio de un ambiente familiar, el prelado trujillano también colocó al Niño Jesús sobre un pesebre elaborado sobre el monumento a La Libertad.
Minutos antes el pastor de la grey trujillana presidió una solemne Misa en la Basílica Catedral, con la activa participación de las principales autoridades de la región y la ciudad, así como fieles en general. Durante la ceremonia de bendición el Arzobispo recordó que “Cristo es la luz del mundo y quien lo sigue no caminará en tinieblas, es por eso que en la navidad siendo la presencia del Niño Dios entre nosotros, el Emanuel, se llenan de luces y colores las casas, las tiendas, las calles, las plazas”.
Este tradicional festival ha motivado gran interés en los fieles, quienes se quedan maravillados con los árboles multicolores que las empresas que apadrinan el festival presentaron con mucha creatividad, todo ello con el fin de unirse a esta bella expresión de amor por el Nacimiento de Nuestro Salvador, que contagia y llena de alegría los corazones de todos los cristianos.
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