Como se sabe, durante este verano, y de modo particular la semana pasada, la sierra trujillana (sector de collona, distrito de Huamachuco, Coitin, distrito de Usquil, Retamas, distrito de Pataz, Chamanacucho, distrito de Sánchez Carrión y algunos otros pueblos), soportaron huaicos, producidos por las torrenciales lluvias.
Con la conferencia de prensa, realizada la tarde de ayer, en el Palacio Arzobispal, la Arquidiócesis de Trujillo emprendió la Cruzada de Solidaridad Pro- Damnificados de la Sierra Liberteña. Se estima que numerosas familias han perdido sus viviendas, sus sembríos y necesitan urgente ayuda. El Vicario General, Mons. Ricardo Angulo Bazauri y el Administrador del Arzobispado, R.P. Francisco Castro, en nombre del Arzobispo, Mons. Miguel Cabrejos Vidarte, OFM, hacen la invitación a todas las personas de buen corazón a que se unan en esta campaña, con el fin de llevar esperanza a quienes más lo están necesitando.
Como se sabe, durante este verano, y de modo particular la semana pasada, la sierra trujillana (sector de Collona, distrito de Huamachuco; Coitin, distrito de Usquil; Retamas, distrito de Pataz; Chamanacucho, distrito de Sánchez Carrión y algunos otros pueblos), soportaron huaicos, producidos por las torrenciales lluvias que se precipitan en esta zona. Las víctimas y las pérdidas materiales son considerables. Necesitamos identificarnos, hoy más que nunca, con nuestros hermanos que sufren.
Las donaciones se reciben a partir de hoy, en el museo del Arzobispado Metropolitano de Trujillo (al costado de la Catedral). Lo que se necesita es frazadas, calaminas, plásticos, y artículos no perecibles. El Arzobispado agradece a cada una de las personas que quieran ofrecer sus donativos y, a la vez, hace extensivo el llamado a toda la comunidad para que apoyen a las personas afectadas por estos desastres naturales.
Con la conferencia de prensa, realizada la tarde de ayer, en el Palacio Arzobispal, la Arquidiócesis de Trujillo emprendió la Cruzada de Solidaridad Pro- Damnificados de la Sierra Liberteña. Se estima que numerosas familias han perdido sus viviendas, sus sembríos y necesitan urgente ayuda. El Vicario General, Mons. Ricardo Angulo Bazauri y el Administrador del Arzobispado, R.P. Francisco Castro, en nombre del Arzobispo, Mons. Miguel Cabrejos Vidarte, OFM, hacen la invitación a todas las personas de buen corazón a que se unan en esta campaña, con el fin de llevar esperanza a quienes más lo están necesitando.
Como se sabe, durante este verano, y de modo particular la semana pasada, la sierra trujillana (sector de Collona, distrito de Huamachuco; Coitin, distrito de Usquil; Retamas, distrito de Pataz; Chamanacucho, distrito de Sánchez Carrión y algunos otros pueblos), soportaron huaicos, producidos por las torrenciales lluvias que se precipitan en esta zona. Las víctimas y las pérdidas materiales son considerables. Necesitamos identificarnos, hoy más que nunca, con nuestros hermanos que sufren.
Las donaciones se reciben a partir de hoy, en el museo del Arzobispado Metropolitano de Trujillo (al costado de la Catedral). Lo que se necesita es frazadas, calaminas, plásticos, y artículos no perecibles. El Arzobispado agradece a cada una de las personas que quieran ofrecer sus donativos y, a la vez, hace extensivo el llamado a toda la comunidad para que apoyen a las personas afectadas por estos desastres naturales.
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